Mariposas nocturnas: los fantasmas de la noche
Las mariposas pueden dividirse en dos grandes grupos: las que poseen antenas en forma de maza (como las utilizadas en la gimnasia rítmica), también conocidas como mariposas diurnas; y otras que tienen las antenas de formas diferentes, bien filiformes, en forma de peine, o plumosas, nunca en forma de maza: a éstas -por sus hábitos- se las conoce como polillas o mariposas nocturnas. En el árbol taxonómico, las polillas pertenecen a los llamados heteróceros; tienen costumbres discretas, suelen volar de noche y por lo general pasan desapercibidas durante las horas de luz.
Varias son las características que hacen de las mariposas nocturnas un grupo zoológico muy valioso aunque poco conocido y valorado. En primer lugar son polinizadores activos (muchas de ellas también vuelan de día libando flores y otras plantas); están en la base de la cadena trófica (la alimentación) zoológica, por lo que su desaparición supondría una merma importante del número de aves insectívoras, de murciélagos, de pequeños reptiles y de multitud de insectos. Sin ellos el avance de las plagas sería imparable y haría nuestra existencia mucho más incómoda e incierta. Por último son indicadores biológicos de extrema importancia ya que nos informan de la salud ambiental del territorio, de los cambios existentes a nivel climático, siendo testigos vivos de la recuperación de la vegetación tras los incendios y quemas, desafortunadamente tan habituales en nuestra comarca.
No sabemos a ciencia cierta el número de especies de heteróceros que viven en Cantabria, y tampoco en los Valles Pasiegos; pero en el municipio de Liérganes tenemos una de las estaciones de muestreo de mariposas nocturnas de la Asociación ALAS y del «Proyecto LEPIDES». Dicho proyecto estudia la distribución de las mariposas nocturnas en los Valles Pasiegos, y junto con los datos que recopilamos durante las salidas de NATUREA, se va completando la información sobre este valiosísimo grupo zoológico. De momento, y tras el primer año de muestreos, podemos asegurar que los Valles Pasiegos son un lugar de excepción para las mariposas nocturnas o polillas, habiéndose identificado más de 350 especies diferentes ligadas a los espacios naturales de la Red Natura 2000.
Si bien la mayoría de las llamadas polillas muestran libreas apagadas, parduzcas o sin coloraciones llamativas, hay muchas de ellas que rivalizan en belleza con las más vistosas mariposas diurnas. Durante nuestros paseos por la Red Natura 2000 o en las noches de buena temperatura hemos fotografiado algunas que ahora traemos aquí. Entre ellas contamos con auténticas bellezas y algún récord que otro. Precisamente son las rutas temáticas que ofrecemos las que a partir del segundo semestre de 2017 nos permitirán descubrir muchas de ellas, incluidas –quizás- alguna de las cinco más vistosas que aquí te presentamos.
1. Gran pavón nocturno (Saturnia pyri).
Es la mayor mariposa nocturna de Europa, perteneciente a la familia de los satúrnidos. Puede encontrarse en los Valles Pasiegos entre los meses de mayo y julio, volando a partir del crepúsculo. Habita zonas forestales y su oruga se alimenta de hojas de fresnos, alisos, sauces y álamos. Cuando vuela parece un murciélago confundiéndose fácilmente con él. Las lechuzas las capturan durante las primeras horas de la noche y a pesar de su tamaño son inocuas. Los machos no suelen vivir más de 72 horas y deben encontrar hembras en ese período para fertilizarlas y así asegurar su descendencia.
2. Tau (Aglia tau).
Este bellísimo satúrnido se denomina «Tau» por el trazo blanco que presenta en el interior de sus ocelos, que asemeja a la letra griega del mismo nombre. Los machos y hembras difieren en el color de fondo, cremoso en las hembras y canela anaranjado en los machos, que también destacan por sus antenas plumosas. Frecuenta los hayedos durante los meses de mayo y junio, siendo parcialmente diurna. Los machos emergen de sus pupas a través de la hojarasca del suelo a primeras horas de la mañana, y tras desplegar sus alas vuelan cerca del suelo hasta medio día, ascendiendo entonces a las copas de las hayas para buscar a las hembras que allí revolotean. Es una mariposa poco común aunque ampliamente distribuida por la comarca.
3. Polilla armiño europea. (Cerura erminea).
Su librea blanco puro recuerda a la piel invernal del armiño, de ahí su nombre. Frecuenta las zonas boscosas de ribera, ríos y bosques-galería, viviendo la oruga sobre hojas de árboles caducifolios como sauces y abedules. Su área de distribución ibérica se restringe al norte peninsular y a la franja cantábrica, donde puede observársela volando al caer la noche y descansando sobre los troncos de los árboles cerca de los ríos.
4. Esfinge de la Vid. (Deilephila elpenor).
La atractiva esfinge de la vid se alimenta de plantas como el laurel de San Antonio (Género Epilobium spp.) y otras especies, incluyendo la vid. Pertenece a la familia de los esfíngidos, también conocidos como «polillas-colibrí» ya que baten las alas con tal rapidez que pueden detenerse en el aire tal y como hacen estas diminutas aves. En los Valles Pasiegos se las puede encontrar al caer la tarde y durante el crepúsculo, en zonas de praderías con flores próximas a las áreas boscosas.
5. Blanquitas (Crambus spp.)
Y por último traemos a estas páginas una de las mariposas nocturnas más pequeñas de nuestra fauna. Las polillas del género Crambus spp. miden entre 10 y 14 mm de longitud y son de las más abundantes en nuestra comarca. Son polillas de colores blancos o beis que viven en los campos de gramíneas, comiendo sus orugas las hojas y flores de esta familia de plantas. Suelen descansar sujetas a un tallo y vuelan con facilidad cuando pasamos andando por un prado o una campa y, al mover inadvertidamente la hierba, huyen volando y vuelven a posarse unos metros por delante, mimetizándose con la vegetación circundante.
Sirva esta introducción como inicio al apasionante mundo de estos seres, muchos de ellos sólo visibles durante la noche. La riqueza en especies de la Red Natura 2000 en Valles Pasiegos es asombrosa y muestra la buena salud que tiene nuestro medio natural; pero el seguimiento de poblaciones y fenología de las diferentes especies es necesario para comprobar la evolución de la salud del territorio. Con la llegada de las buenas temperaturas el vuelo de polillas será cada vez más evidente, y desde el Valle del Luena a los contrafuertes del alto Miera, seguiremos con el ojo bien abierto para mostrar estas joyas aladas durante nuestras salidas diurnas, y pronto también, en horario vespertino.
Equipo de guías de NATUREA CANTABRIA Red Natura 2000 en Valles Pasiegos
Agradecimientos: A la Asociación ALAS y al equipo de seguimiento del «Proyecto LEPIDES».
Fotos: Jorge Garzón / Proyecto LEPIDES.