Comarca: Liébana
Duración: 5 horas
Dificultad: Media
Desnivel acumulado: 500 m
Distancia horizontal: 12 km
Tipo de recorrido: Circular
Tipo de firme: Sendero y camino de herradura
Comenzamos el recorrido en el pueblo de Campollo (Vega de Liébana), documentado desde el año 961, en sus montes se produjeron los primeros asentamientos poblacionales de la comarca, todavía quedan restos megalíticos de los pueblos pastoriles, en la “La Majada Nueva”. El camino a recorrer, comienza por la zona de prados de siega y diente que están en la parte baja del pueblo, por el camino viejo que les comunicaba con el pueblo de Valmeo. En ésta parte del recorrido, los prados son rodeados por orlas espinosas con alguna encina, donde es de interés para divisar alguna ave de campiña, característica de éstas zonas.
El recorrido continúa dirigiéndonos hacia la riega de Retumbia, entrando en bosque mediterráneo dominado por encinas y algún alcornoque que aparece de forma esporádica, en el sotobosque; madroños, enebros, labiérnagos y aladiernos ocupan el espacio y encontramos tambien, plantaciones de pino de los años 50, que se realizaron en sustitución a los viñedos de la época
Avanzando poco a poco por el recorrido, vamos viendo la transición al bosque atlántico con robledales maduros de rebollo (Quercus pyrenica), dominando la masa y acompañado en el sotobosque, por mantos de brezos de diferentes especies; Daboecia cantabrica, Erica arborea, Erica cinerea,…. algunas de ellas, endémicas de la Cordillera Cantábrica. Desde diversos puntos, divisamos el modelado del paisaje que nos deja las aguas de la riega de Retumbia hasta llegar al pueblo de Maredes. Desde allí, por un sendero pastoríl, subimos hacia el Monte la Viorna. Desde éste punto se puede ver toda la comarca, pudiendo mostrar la diversidad de los hábitats, la orografía, junto con valores naturales y patrimoniales que hacen a Liébana una de las comarcas más importantes en conservación de la naturaleza.
Continuamos subiendo un poco más, hasta alcanzar el Alto de San Martín, donde podemos ver la huella que deja el fuego, puesto que es una zona donde en varias ocasiones los rayos de las tormentas, han desencadenados pequeños conatos. Comenzamos a descender por una zona de robledal hasta las Praderías de la Mata, zona cercana ya al pueblo de Campollo y por tanto, al final del recorrido. Paramos en la zona de la Mata; área de pastizal desde donde se da vista al valle de La Vega de Liébana y dónde podemos hacer lectura de cómo, con la disminución de la actividad humana, en este caso la ganadería, se van produciendo cambios en el paisaje y cómo eso influye a las especies que habitan en estos lugares. Finalmente llegamos de nuevo al pueblo de Campollo, punto final del recorrido.