Atención, esta actividad se desarrolla en el municipio de Potes.
Duración: 4:00 horas
Dificultad: Media
Desnivel acumulado: 380 m
Distancia horizontal: 12 km
Tipo de recorrido: Circular
Tipo de firme: Sendero y pista forestal
La ruta comienza en la villa de Potes, que enclavada en la confluencia de los ríos Deva y Quiviesa, ostenta la capitalidad de la comarca. A lo largo de este itinerario, se descubrirán encinares y los muy notables alcornocales lebaniegos que caracterizan el fondo de valle de la comarca. Se trata de una buena representación de los ecosistemas mediterráneos que forman parte del LIC Liébana.
El recorrido abandona la villa remontando aguas arriba el río Quiviesa, contemplando la vegetación de ribera hasta llegar al puente de Valmeo. Una magnífica representación de alisos (Alnus glutinosa), avellanos (Corylus avellana), chopos (Populus nigra), fresnos (Fraxinus excelsior) y sauces (Salix sp.) forman parte de la vegetación que orla al río Quiviesa, hábitat que forma parte del LIC Río Deva.
Tras cruzar la carretera nacional y recorrer el barrio de abajo de Valmeo el sendero conduce a un encinar donde se disfruta además de la diversidad de especies del sotobosque mediterráneo que le acompaña, como los madroños (Arbutus unedo), aladiernos (Rhamnus alaternus), cornicabras (Pistacia terebinthus), labiérnagos (Phillyrea angustifolia), ruscos (Ruscus aculeatus), así como especies aromáticas tales como tomillos, lavandas o cantuesos.
El sendero conduce hasta Porcieda, se trata de una aldea abandonada desde la década de los sesenta del siglo pasado, al no haberse restaurado las casas desde entonces, es un claro reflejo de cómo era la arquitectura tradicional de la comarca de Liébana, con las fachadas de sieto, corredores orientados a la solana, corrales para el ganado junto a la vivienda, etc.
Desde Porcieda, el camino de regreso a Potes es de descenso, en este recorrido se irán descubriendo inicialmente algunos ejemplares de alcornoque (Quercus súber) en el encinar, hasta adentrándonos por completo en el Alcornocal de Tolibes, se trata del alcornocal lebaniego de mayor extensión. El clima local o microclima con el que cuenta Liébana, favorece que el alcornoque exista de forma natural, principalmente por las escasas precipitaciones en el fondo de valle, de unos 500-600 mm. Anuales.
El sendero permite además contemplar las ruinas de un antiguo monasterio medieval, el Monasterio de Santiago, emplazado en un alto desde el que hay una magnífica panorámica de la comarca.
Se ha de continuar el descenso por el alcornocal, pasando junto al invernal de Tolibes, cabaña para el ganado construida junto a una gran finca que sigue en uso en la actualidad por lo que posiblemente el caminante hallará en este lugar una buena cabaña ganadera de vacas de raza pardo alpina o tudanca.
El camino conducirá sin confusión de nuevo a Potes por su parte más alta. Desde aquí se ha de cruzar el casco antiguo del pueblo para regresar al puente de San Cayetano.