Duración: 4 horas
Dificultad: Media
Desnivel: 270 m
Distancia horizontal: 6.4 km
Tipo de recorrido: Circular
Tipo de firme: Senderos y pistas forestales
Monte Coza es una de las estribaciones del Páramo de Bricia, una pequeña elevación que cae hacia el pueblo de Villaescusa de Ebro por el sur, y se extiende hacia la llanura del páramo por
su parte norte. Forma parte como espacio de RED NATURA 2000, dentro de la Zona de Especial
Protección para Aves (ZEPA) Hoces del Ebro, el espacio natural protegido más meridional de
Cantabria.
La ruta presenta varios ambientes muy marcados, propios del entorno del Cañón del Ebro. En la parte inferior, encontramos un robledal, formado por rebollos y quejigos, con alguna otra especie proveniente de la cercana ribera del Ebro. A medida que ascendemos, el suelo se vuelve más rocoso y da paso a los especialistas de suelos calizos: encinas y enebros, acompañados de lavandas, gayubas y brezos. El medio más hostil en este entorno, lo forman los cortados calizos del páramo, escarpes y paredes prácticamente verticales, donde se agarran algunas encinas y enebros,
los más aventureros, allá donde haya un pequeño resquicio.
Esta diversidad de ambientes lleva asociada una rica comunidad de aves, desde las grandes rapaces, como buitres y alimoches, hasta las pequeñas currucas del encinar, pasando por aves más generalistas como las abubillas, las aves asociadas a medios forestales (carboneros comunes, garrapinos y palustres, herrerillos común y capuchino), y los especialistas de la roca: aviones
roqueros, vencejos, etc.
La ruta asciende por el Páramo de Bricia, hasta asomarnos a uno de los cortados rocosos, donde encontraremos un observatio de aves. Desde allí, bordearemos el páramo para bajar por el barranco de Monte Coza, y regresar al punto de partida atravesando el robledal.