Duración:5:30 horas
Dificultad: baja
Desnivel acumulado: 350 m
Distancia horizontal: 13 km
Tipo de recorrido: Circular
Tipo de firme: Sendero
En esta ocasión nos adentramos en uno de los rincones naturales más desconocidos del municipio de Cabuérniga para recorrer la Reserva Natural Fluvial (RNF) Arroyo de Viaña, una de las cinco Reservas Fluviales de Cantabria. El Arroyo de Viaña es un pequeño afluente del río Saja que forma parte de la Zona de Especial Conservación de este río. Se trata de un característico arroyo cantábrico que modela canales sobre calizas y conglomerados; a lo largo de su curso disfrutaremos de sus saltos de agua, cascadas y pozas, donde habita la trucha común, la nutria, el turón y varias especies de anfibios y reptiles. Sobre sus aguas, de buena calidad ambiental, sobrevuelan aves como el martín pescador y el mirlo acuático, entre otros, así como una comunidad importante de invertebrados que representan su fuente de alimento en el medio acuático.
Al inicio de nuestra ruta sortearemos el río con el propósito de conocer el último bosque de robles de Viaña, donde habitan especies de aves amenazadas como el pico mediano, y mamíferos como el corzo, zorro, ciervo, tejón, etc, con suerte podremos ver en el bosque señales de su presencia, o incluso llegar a tener algún encuentro. Durante el recorrido circular, de dificultad media, iremos remontando el arroyo por el interior del bosque de ribera en un ambiente húmedo y umbrío formado por alisos, sauces y avellanos. El regreso, que se hace entre los prados de siega del pueblo de Viaña, hará que esta ruta sea una de las que queramos repetir en cualquier época del año.
Las Reservas Naturales Fluviales (RNF) son figuras de protección declaradas en los años 2015-17 con el objetivo de conservar los últimos ríos o algunos de sus tramos y afluentes con un alto grado de conservación de nuestro país. Este es el caso de dos afluentes del río Saja en su tramo protegido por la Red Natura2000 como Zona de Especial Conservación Fluvial: el arroyo de Viaña en Cabuérniga; río Argoza y Queriendo; y cabecera del río Saja en los Tojos y Mancomunidad Campoo-Cabuérniga. Se trata de tramos del río Saja con escasa o nula intervención humana y con una elevada naturalidad, a los que se les dota de protección en su dominio público hidráulico, con la finalidad de ser preservados sin alteraciones.