Duración: 5:30 h.
Duración total de la actividad: 6 h.
Desnivel: 350 m
Distancia: 13 Km
Tipo de firme: sendero y pista forestal
Dificultad: Media
Aforo de la actividad sujeto a posibles restricciones por el COVID-19. Con la actualización semanal del semáforo COVID-19 del Gobierno de Cantabria es posible que esta actividad vea su aforo reducido por posible un aumento de la incidencia del virus en el municipio en el que se desarrolla. En ese caso tendremos que dar de baja a las últimas personas inscritas.
Ruta circular, que nos acerca a uno de los balcones naturales más sobrecogedores de la Comarca de Liébana y la vecina comarca de La Pernía, desde donde podremos vislumbrar Los Picos de Europa, Cordillera Cantábrica, Cordillera de Peña Sagra o la característica Peña Labra.
Situada en la parte alta del municipio de Pesaguero, en su frontera con tierra Palentina, discurre ondulante y sosegada entre hayedos y brezales, que comparten el espacio con los pastos de puerto, a los que siguen acudiendo los ganados de la junta de Santa María de Valdeprado.
En nuestro recorrido, seremos testigos privilegiados de las huellas, que en el pasado y aún hoy, el paisanaje imprime en esta parte de Liébana, a través de la ganadería extensiva y del aprovechamiento de los pastos de altura, y su evolución simbiótica con la fauna y flora salvajes que cohabitan estos espacios de antigua historia.
Avanzaremos siempre bajo la ostensible presencia de los farallones calizos que aquí afloran, caso de Peña Ciqueras, que imprimen su carácter particular a esta parte de Liébana y nos recuerdan, aunque sea en dimensiones más reducidas, la geomorfología caliza típica de los siempre presentes Picos de Europa. Para recorrer olvidados caminos, que nos hablarán de historias antiguas y modernas, observadas siempre bajo la atenta mirada de las incansables actividades pastoriles, que en estos lugares se presentan vestidas de cotidianeidad.